La Mid Sweden University en Sundsvall, Suecia, y MoRe Research en Örnsköldsvik, Suecia, están cooperando con el instituto de investigación noruego RISE PFI en el proyecto PlastiCel. El objetivo es desarrollar materiales compuestos a partir de nanocelulosa y celulosa, que pueden usarse como barrera para el calor, el aire y la humedad. Esto significa que productos tales como bandejas de pescado que en su mayoría están hechos de plástico hoy en día, podrían en el futuro consistir en materiales compuestos, aislantes térmicos hechos de celulosa y nanocelulosa, con buenas características de barrera contra el aire y la humedad.
El objetivo es desarrollar un embalaje que pueda soportar transportes largos y así pueda utilizarse para transportar peces. El envase está cubierto con una película delgada hecha de celulosa plastificada y nanocelulosa, que proporciona una barrera contra el oxígeno. El núcleo del embalaje es una espuma hecha de celulosa plastificada y nanocelulosa, que proporciona características de aislamiento para mantener una baja temperatura en el embalaje durante el transporte.
Malin Brodin, científica investigadora de RISE PFI, señaló que «para reducir las grandes cantidades de plástico que terminan en los océanos, es importante reemplazar el plástico en todas las aplicaciones donde sea posible. La celulosa es biológicamente degradable en la naturaleza y es una buena opción. Es una materia prima alternativa para películas de plástico y espumas aislantes para el embalaje».
PlastiCel es un proyecto de investigación sueco-noruego con investigadores de RISE PFI en Trondheim, Mid Sweden University en Sundsvall, y MoRe Research en Örnsköldsvik. Los socios de la industria son SCA, Domsjö Fabriker, Essge-Plast, Ranheim Paper and Board, Tommen Gram y BEWi. El proyecto cuenta con el respaldo financiero del fondo de desarrollo regional de la UE, Interreg.
Fuente: TAPPI, 16 de marzo de 2018.